Solo


Tal vez por ser de noche este aposento es triste,
mi conciencia vacía desde lejos me llama.
El rincón más oscuro de esperanza se viste.
Y yo me quedo quieto, postrado en esta cama.

Las máculas del sueño ya no recuerdan nada,
mi amada poesía se incinera en mis hombros.
Soy dolor, soy tristeza; mi alma desesperada
quiere sobrevivir por sobre mis escombros.

El silencio desluce una lágrima mía,
que seca y conjugada sigue siendo tristeza;
cada amor, para mi, sólo es melancolía.
Esta decrepitud es mi única belleza.

Solo, lejos del mundo, triste y abandonado;
busco en mis cicatrices para ver si te encuentro,
pero no estás aquí, ni aquí, ni en otro lado,
porque el amor los hombres no los llevamos dentro.

No hay comentarios: